A Seira por el Congosto de Ventamillo

Antonio de Casa Estremero nos ha descubierto esta mañana este maravilloso paseo. Las vistas sobre el Congosto de Ventamillo y el macizo de Cotiella son espectaculares. Si la salida del valle suele encoger el corazón, hacerlo por este sendero es un placer.

Datos

Inicio: El Run.

Final: Seira.

Recorrido: 6km. aprox.
Tiempo: 2h 30m aprox.

Bifurcación

Esta excursión es una parte del GR15, pero este trozo es ideal para disfrutar de unas vistas espléndidas con un nivel de esfuerzo medio-bajo.
El paseo comienza en el Run, donde podéis dejar el coche aparcado. Tened en cuenta que tendréis que dejar otro vehículo en Seira si queréis volver en coche una vez terminada la excursión. Tenéis que descender hacia el río Ésera desde la carretera justo después de la casa de piedra que tiene el anuncio de un bar (aparentemente inexistente). Allí encontraréis un puente y tras cruzarlo girad a la derecha. Al cabo de unos metros encontraréis una bifurcación (de hecho es un camino que se separa de la pista por la que hemos cruzado el puente). Tomad el sendero a la izquierda y continuad por él hasta encontrar el cartel que indica la dirección de las rutas a Gabas y a Seira por el Congosto (foto que encabeza esta entrada). No muy lejos de allí tendréis que cruzar el barranco que baja de Gabás por una palanca "indianajonesca". A partir de ese momento el sendeo llanea entre bosques de pino siempre con el río a la derecha y empieza a ascender muy lentamente. 

Nuestro guía con Gallinero al fondo

Unos minutos más tarde pasaréis por debajo de lo que parece un rostro esculpido en la pared y el camino empezará a empinarse un poquito más. Lentamente y bordeando riscos con abundante vegetación (no tendréis una sensación muy aérea), tomaréis altura hasta tener buenas panorámicas hacia el interior del valle: Gallinero, Ramastué, Liri, etc.

Macizo de Cotiella

Un poco más adelante, las vistas serán espectaculares hacia el macizo de Cotiella y el valle de Barbaruéns. Una vez alcanzada la altura máxima, se sigue llaneando por la cornisa hasta llegar a la pista que une Gabás con Seira. Desde este punto se inicia un descenso paulatino pero contínuo hasta llegar a la colonia de Seira, donde podéis tomaros un merecido refrigerio.